Por fin me toca, o mejor dicho puedo hablar de ASPANOVAS. Ya era hora, como dice mi padre cuando hice este blog este era un tema que me tenía muy quemado. Habían pasado cosas que no me gustaban y que algunos de vosotros sabéis, y yo quería escribir sobre ellas.
Ahora ha pasado algún tiempo y pienso que me he acostumbrado a algunas cosas, aunque me siguen fastidiando igual que antes, cuando ocurrieron.
Algunos ya sabréis que estoy hablando del psicólogo. Para los que no tenéis ni idea del tema os cuento que cuando yo empecé con mi enfermedad había un psicólogo en la unidad de oncología. Ahora ya no está. Esta persona no pertenecía al hospital porque fue colocada allí un día por la Asociación para atender a los chavales y a los padres con el permiso de la gerencia (de su día) del hospital y era la Asociación la que le pagaba.
Después de dieciséis años de trabajar en el hospital, alguna mente retorcida ha decidido que ya no es bueno y entre unos y otros han conseguido que Jon salga del hospital.
Ya he hablado en este blog alguna vez de él. Para mí ha sido una persona que me ha ayudado siempre que me ha hecho falta y me parece un tipo cojonudo. Por eso me ha dado tanta rabia que se haya tenido que marchar y sobre todo porque ahora lo echo de menos en el hospital.
Pero no es de él de quien quiero hablar sino de la gente que últimamente le ha hecho la vida imposible. La gente que dirige ASPANOVAS y que no solo han permitido que esto pasase sino que han colaborado en ello.
ASPANOVAS es una asociación de padres de niños con cáncer, en este caso de Bizkaia. Así de duro.
Lamentablemente está dirigida por unos padres que se han apoderado de ella y hacen y deshacen lo que les da la gana y a su manera. Podría contaros bastantes anécdotas de lo incapaces y prepotentes que son, pero las iré poniendo poco a poco para no dar el turre. Algunas las he tenido que sufrir en mis propias carnes, como se suele decir, y otras las sufrimos todos.
No admiten la crítica, y manipulan todo a su antojo y conveniencia. Algun@s tienen lado oscuro. Muy oscuro. Muy oscuro…
Hace tiempo mi padre metió esta fábula en el foro que tienen (foro, que dicho sea de paso, se han cepillado cuando otros padres han escrito cosas que les hacían pupa):
LA SERPIENTE Y LA LUCIERNAGA
"Cuenta la leyenda que una vez una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga. Esta huía rápido y con miedo de la feroz depredadora, y la serpiente no pensaba desistir. Huyo un día, y ella no desistía, dos días y nada...En el tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y dijo a la serpiente:
- ¿Puedo hacerte una pregunta?
- No he tenido este precedente con nadie, pero como te voy a devorar, puedes preguntar...
- ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia?
- No
- ¿Yo te hice algún mal?
- No
- Entonces, ¿Por qué quieres acabar conmigo?
- Porque no soporto verte brillar... "
Esta fábula refleja perfectamente como son. La serpiente, existe. Y la luciérnaga también.
Para ser justo tengo que decir que estamos hablando de la ASPANOVAS de hoy, que nada tiene que ver con la de hace años.>
También digo que hacen cosas buenas para los chavales, pero eso no quita que yo pueda contar lo que me parece que hacen mal o simplemente dejan de hacer, porque en mi balanza pesa más lo malo y absurdo y sobre todo lo caraduras que pueden llegar a ser algún@s de ellos. Ya contaré.
Me gustaría que vuestras opiniones fueran limpias para no perjudicar a la Asociación y a lo que representa, que al final es lo que importa.
Manu, ojito a la máquina. ¿No eres el tercero por la cola?
Para Isabel F.
He leído tu última entrada.
“…vuelvo a encontrarme con una cuesta arriba que por supuesto acabaré subiendo.”
Me encanta esta frase.
A veces denunciar cosas nos viene bien. ¿No te has quedado un poquito más relajada? A mí me viene bien.
Besos de esta familia.
