martes, 19 de mayo de 2009

EL GUAJIRO SALIO CORRIENDO CON EL POLLO

INTRODUCCION: Valencia-Guacara- Puerto Ordaz-Venezuela- 1988.

HISTORIA: En plena campaña electoral. Estaba de presidente Jaime Lusinchi, y el candidato con mas posibilidades de ganar era Carlos Andrés Pérez “El Gocho”. “El Gocho” ya había sido presidente en el periodo 1974-1979. Venezuela conoció un periodo de prosperidad económica y social gracias a los ingresos por exportación de petróleo. Fue conocida con el apodo de "Venezuela Saudita", nadaba en la abundancia en un mar de petróleo.
En este año de 1988 el país que yo encontré tenía una gran crisis. El bolívar, moneda nacional, iba de mal en peor, cada día cada hora tenia una cotización menor. La Venezuela rica se había evaporado. Todo el mundo recordaba los años dorados, nos contaban como vivían en aquella y reciente época. De pronto vino la pobreza. Golpe duro de asimilar. De la noche a la mañana pasaron de ricos a pobres. Los presidentes, políticos, policía, funcionarios, la corrupción en todas partes, la deuda externa, la caída del petróleo, nadie sabia el porque de la crisis.

Venezuela es uno de los países, que yo conozco, con las mayores riquezas, riquezas en todos los sentidos. Tiene la naturaleza más exuberante e impresionante que te puedas imaginar. Naturaleza llena de vida y riqueza, riqueza mineral, hidráulica... “El dorado”. Este dorado ha sido saqueado de sus recursos por todos los capitales extranjeros. Y todos sacan el dinero fuera, a los bancos USA. Nadie se fía de la moneda nacional. Todos nos quieren comprar dólares.

Mi empresa, en donde trabajaba, había hecho unas buenas ventas para la industria del aluminio, en Puerto Ordaz y Guacara.

LLEGADA. Era mi primer viaje al Nuevo Mundo, luego vendrían muchos más.
Mi primer contacto con la realidad se produjo al salir del avión, un chorro de fuego me golpeo la cara, calor, mucho calor, mucha humedad, un mes necesita el cuerpo para aclimatarse al brutal calor y humedad, venias de la playa, el bañador, la ropa mojada no se secaba nunca. El aeropuerto Maiquetía, al borde del mar. Está a unos de 20 kilómetros de Caracas. Me esperaba un “carro” de la fábrica. Destino: Valencia pasando por Caracas.
La visión y el contraste de Caracas es brutal, por una parte la gran y moderna ciudad y por la otra, rodeada de los millones de ranchitos que cubren de manera abigarrada todos los montes y colinas. La Infra-ciudad. Mis ojos no daban crédito a lo que estaba viendo, miseria miseria, miseria. El guajiro deambulaba por la autopista en decadencia, alguna tapa de alcantarilla había sido robada del firme de la calzada, trampa mortal para el asalto.

ALOJAMIENTO. En Valencia nos alojamos en el mejor hotel “Hotel Intercontinental” todo un derroche de lujo, piscinas, bares, tiendas, baile, restaurantes…

POLITICA. A este hotel venían los políticos a hacer las convenciones y mítines del partido. Todo un espectáculo la llegada de los políticos con sus guardaespaldas armados hasta los dientes, con metralletas en ristre, como de película, de los grandes y ostentosos “carros” aparecían sus señoras emperifolladas, llenas de joyería y vestidos recargados, decimonónicos, TIO PACO, esto si que era una verdadera cutrez, la ostentación ridícula del poder. Esta misma ceremonia valía para las fiestas de las niñas en su puesta de largo, al hacer 15 añitos la palomita. Muchas cintas de colores orquestas, canapés, champagne, ron… En estas fiestas, nosotros entre los invitados nos poníamos las botas, de todo. Las empresas, la mía también, daban dinero a los partidos para la compaña electoral, mejor apostar a los dos caballos ganadores para asegurarse los favores del triunfador.

LA CORRUPCION. Se veía por todas partes, POLICIA, AEROPUERTOS, ADMINISTRACION, con la mordida se arreglaba todo en el acto. Si no hay dinero el funcionario te hacia el trámite imposible, todo eran pegas.
LA SEGURIDAD. Todas las puertas y ventanas dobles, una exterior de barrotes carcelarios y la otra blindada. Por dos veces nos robaron la oficina.
FABRICA. Estaba en Guácara distante 15 km de Valencia. Todos los días hacíamos el viaje por la autopista. A la puerta de la fábrica todas las mañanas esperaban cientos de trabajadores en paro con la esperanza de ser elegidos para algún trabajo. La trata moderna de esclavos, este si, este no. Los pistoleros sindicalistas eran los que decidían quien trabajaba. Cada fin de semana se pasaba el mafioso del sindicato por los tajos y les cobraba la cuota semanal, era un tipo alto con gafas oscuras y un gran bigote y en la sobaquera se intuía su gran pistolón. Las armas en Venezuela no estaban permitidas pero todo el mundo llevaba el pistolón en la guantera del carro.
La fábrica era muy moderna, nueva, lo que mas me llamó la atención fue la integración de la mujer en todas las áreas de la producción. Había mujeres en todos los departamentos y con altas responsabilidades, licenciada responsable de planta, jefa de producción,….. Ver contornearse a la licenciada por la nave de la fábrica, con sus grandes tacones y falda bien ceñida, todo un espectáculo, nunca había vista cosa igual en las fabricas españolas, francesas o alemanas.

MISION. Dar unos cursillos sobre los laminadores a un grupo de ingenieros y a un grupo de operarios.
CURSILLOS. Hablábamos mucho del cambio que se estaba produciendo en España. Tenia que tener mucho cuidado en no emplear la palabras “COGER” “SOPLAR”, al principio era difícil no usarlas alguna vez. Cuando esto ocurría el coro de risas te hacia recordar que no lo tenias que decir. Me imagino que sabréis lo que significan estas palabras en estos países.

LA LLUVIA.
Un “Palo de agua”es una lluvia tan torrencial que parece que están tirando cubos de agua sin parar. Cuando la lluvia cesó ante mis ojos aparecieron montones de pequeños animalillos, ranitas,… ¿de donde había salido tanta rana? Yo no sé si estaban en la tierra o caían del cielo. Algunas consiguieron entran en la fábrica, allí en un foso con agua negra estuvo un sapo una gran temporada.

LAS IGUANAS. Son las reinas, a veces cruzaban veloces por la nave, con la cabeza levantada, ante nuestro asombro. En los árboles de los jardines del hotel había muchas Iguanas. Casi siempre inmóviles al sol. Nos dijeron que debíamos tener cuidado con la serpiente coral de anillos rojos amarillos y negros.

RESUMEN. Tengo que acabar para no aburrir al personal. Me gustaría escribir más y más, del “Centro vasco” las élites de Valencia, de Jiménez el falangista-anticapitalista de la empresa eléctrica sueca… De las compras de los venezolanos en Miami… De las playas de Morrocoy, Cayo Sombrero, de las mulatas...
Mejor lo cuento otro día, o escribo un libro,….…
(Todavía me queda Puerto Ordaz donde los ríos Orinoco y Caroni se unen pero no se juntan ya que sus aguas separadas, de distinto color se mantienen hasta llegar al mar. Puerto Ordaz es una ciudad industrial dentro de la selva.)
Los sábados venían los nativos de la selva a vender sus cosillas, arcos, flechas, plumas... Venían tal cual vivían, casi nada de ropa...

Esto que antecede es la introducción de lo que en realidad queria contar. No me extraña que mi chica me diga “¡¡pero que rollo tienes!!”.
COMIDA. En Guácara no queríamos comer en la fábrica, nos gustaba despejarnos un poco y salir a comer fuera. Cerca teníamos un restaurante de comida casera, tenía un patio tipo cordobés con arquería en los cuatro lados, grande, abierto, con una fuentecilla central, en todo el perímetro se situaban las mesas a la sombra. Menú: Copa de camarones con trocitos de piña y salsa, sopa vegetal y pollo asado.

¿ROBO DEL POLLO?
Me acaban se sacar el POLLO ASADO, con la rapidez del rayo una mano agarra el POLLO, y como alma que lleva el diablo desaparece, todos nos quedamos paralizados, no hacia falta explicar lo sucedido, todos lo habíamos visto.
EL GUAJIRO SE HA LLEVADO MI POLLO.
(En realidad con estas pocas líneas me hubiera bastado para hacer todo el relato.)

LA CRISIS DE AQUÍ Y AHORA
¿QUE VA A PASAR CON EL POLLO?

Estas vivencias me han hecho pensar mucho, mucho, mucho,……..

COMENTAR MALDITOS PIRATAS, COMENTAR,…….
Os amo besos
EL MONCAYO



(Una de pollo feliz, Moncayo...)